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Innumerables personas sufren a diario un dolor interminable, frecuentes citas médicas y exámenes, y la desesperanza que conlleva una enfermedad crónica. Conozco muy bien esa lucha. Después de casi dos décadas de sufrir múltiples enfermedades y síntomas aparentemente interminables, finalmente decidí investigar a fondo lo que dice la Palabra de Dios sobre la salud.

Leí casi toda la Biblia en menos de tres meses, buscando la perspectiva de Dios sobre la salud, la enfermedad y la sanación, y me sorprendió lo mucho que Dios tiene que decir sobre estos temas. Me di cuenta de que el profeta Oseas tenía toda la razón cuando dijo: «Mi pueblo perece por falta de conocimiento» (Oseas 4:6). El conocimiento que adquirí cambió mi vida y trajo sanidad a mi espíritu, alma y cuerpo. Luego, pasé los últimos 10 años estudiando a fondo los pasajes que encontré en 52 de los 66 libros de la Biblia que hablan directamente sobre la enfermedad y revelan verdades que transforman la vida.

Sorprendentemente, se enseña poco sobre este tema relevante, y por eso he decidido compartir lo que he aprendido. Esta serie de estudios bíblicos ofrece parte del contenido que también se encuentra en mi libro, Vida para el Cuerpo: Principios Bíblicos para la Salud y la Sanidad.

La lección 8 está disponible en español actualmente. Otras lecciones están en inglés.

 

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